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| Fuente de la imagen: Virvoreanu-Laurentiu en pixabay |
Calentando motores en este lunes festivo en mi ámbito territorial de actuación, previo al inicio de la “segunda semana” laboral de enero, para aquellas personas que tienen la suerte de trabajar. Esta mañana quiero incidir en la necesidad de ser persistente, aunque corra el riesgo de acercarme al dicho “mosca cojonera”. En determinados casos no nos queda más remedio que instar una y otra vez. Pero no quiero utilizar el concepto "mosca cojonera" en sentido negativo, como incordio, fastidio o pesadez, sino en positivo: insistencia, perseverancia, constancia. Hace unos años, 2007, en el post Curcó[1], te escribí sobre el significado de mosca cojonera.
El caso es que si verdaderamente quiero conseguir un anhelo, objetivo o meta, tengo que ser perseverante, porfiado, incansable, constante. La persistencia me lleva a nutrir una sólida y perenne mentalidad, arraigada en una confianza en uno mismo y en un generoso margen de tolerancia con el resto del mundo que me rodea. Esa fuerte mentalidad me hará más ecuánime, más enérgico, más confiado y, por derivación, más radiante, reflejándose en el diario cometido profesional y personal. Que esta semana te sea beneficiosa en lo profesional, laboral, empresarial o institucional, según proceda (Fuente de la imagen: sxc.hu y elaboración propia). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: Virvoreanu-Laurentiu en pixabay.
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[1] Velasco Carretero, Manuel. Curcó, 2007. Sitio visitado el 07/01/2013.