Fuente de la imagen: Virvoreanu-Laurentiu en pixabay |
Sus técnicas son de lo más variopintas, desde soltarte una puñalada trapera en una reunión, a sopetón, como quien no quiere la cosa, hasta prepararte disimuladas emboscadas o dejarte delante de los caballos una y otra vez, pasando por intrigas en bambalinas. Algunas, intentan asumir tareas y más tareas, pretendiendo hacerse las importantes y las imprescindibles. Luego, te van minando con exigencias cada vez más estrambóticas, absurdas y ridículas, mientras te refriegan una y otra vez la cantidad de horas que invierten y el conjunto de labores que realizan. Cuando detectas su estrategia, las acorralas y le indicas, con tacto y delicadeza, lo que piensas, se ponen a llorar, imploran compasión y se excusan en el cúmulo de trabajo que llevan a sus espaldas y otras evasivas, justificaciones y escapatorias.
En fin. Paciencia, le dije. La mejor forma de controlar a estos alacranes que intentan picar a la rana que le está ayudando a cruzar el río, insectos es el sincero camino por el que transitas y el comprometido equipo con el que cuentas, el cual se dará cuenta, temprano o tarde, de estas sabandijas insectas de la oficina. Te dejo el vídeo, subido a Youtube por sacalenguas, donde el presidente de EEUU, Barack Obama liquida a una mosca que le estaba revoloteando mientras le hacían una entrevista. “La maté a la muy imbécil”, exclamó (Fuente de la imagen: sxc.hu). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: Virvoreanu-Laurentiu en pixabay.